Alberca secreta

Aparecí en el terreno, arriba, siendo un dragón y poco a poco me metí por donde debía meterme, este lugar no tenía ningún secreto para mí. Este lugar antes lo defendí con mis garras y me sabía cada recóveco de este lugar. Llegué al alberca y me senté en los escalones, procurando no mojarme.

Llego a la alberca, como era de esperarme ellos ya estaban allí quin sabe hace ya cuanto tiempo.
-Oh ya están aqui- les sonrío en cuanto llego.

Bajo mi ropa tenía mi traje de baño, pero primero decidí sentarme y mojar mis pies.
-lindo lugar eh?- comenté en voz alta

-Sí que es cierto, sí...-Murmuro fijándome en el lugar, recorriendo mi vistazo de cabo a rabo, aunque este lugar no tenía ninguna sopresa para mí. Girándome a la dragona.

-¿Cuantos años tienes...?-Me decidí preguntar, puesto que no le ví en la guerra de los séptimos.

Escuché lo de la edad y me voltié a mirarlos un segundo. -600...!- susurré muy bajito y asombrada
Quedé en traje de baño color carmesí, mi favorito. De un chapuzón me metí al agua sin pensar, esperando no haberles salpicado.

-Cielos! esta fría!- exclamé al entrar al agua y esperé a que mi cuerpo se adaptara a la temperatura

-¿Cómo es que no te logré ver en la guerra de los siete?-Le pregunto mirándola mientras observaba a la humana de reojo, de vez en cuando. Oyendo como comentaba por lo bajo la edad de la chica.

-Yo tengo 1426 años...-Le dije, aunque no croe que importase mucho mi edad, la verdad...

Escuché la conversación que parecía volverse algo tensa. Y me resbalé dentro del agua al escuchar la edad del chico dragón.
Nadé y me acerqué a ellos

-Oigan juguemos un juego, se llama veo veo...lo conoceis?- sonreí y traté de cambiar de tema, era un juego tonto pero no se me ocurría nada mas

-No veo la lógica de jugar a ese juego...-Me encojo de hombros, puesto que yo nací para eso, para luchar, amasacrar, calcinar, deshuesar y asesinar a todo sherk que me encontrase, y a eso he dedicado más de un milenio de mi vida, pero ahora con todas las chorradas de la paz no podía seguir con ello... Siempre he pensado que era una táctica del séptimo para lograr desestabilizar a las demás razas.

-A sus marcas, listos...- reí aprontandome para hacer lo mejor posible

-Ya!- en cuanto dije eso empezé a patalear como tonta, riendome por dentro mientras braseaba con fuerza

Llego al borde y levanto mi cara para encontrarme con la suya también saliendo del agua
-Hemos llegado al mismo tiempo?- pregunté sorprendida, quizá me habría dejado para no quedar tan en ridículo.

-Eso fué divertido-

-Eso suena bien- dije teniendo en cuenta que pensé que no llegaría mas al borde. Hacía tiempo no nadaba así.

Respiro un poco -bien eso ha sido divertido- repito
-Pero ya es hora de que me vaya...espero se repita en otra ocasión- dije a la chica para luego ver al chico dragón empanado.

Salgo del agua y me despido amablemente -adiós, espero verlos por aquí-

-Yo... Lo siento pero me voy-Le digo a la chica que aún estaba aquí en la alberca, me largué del lugar para que en los jardines transformarme en dragon y largarme de este lugar a otro, buscando sherks a los que matar.